Postboda en Santander, en los acantilados de Cerreas
Alberto e Isa desde un primer momento nos dijeron que no querían hacer un reportaje de postboda . Meses después me llamaron y me dijeron que habían pensado en hacerla. Y así el día de la boda estaban relajados y podrían disfrutar de todos sus amigos y familiares.
La preboda la hicimos al atardecer en la playa de Liencres, arena y mar, y para esta ocasión ellos también querían mar. Decidimos cambiar arena por acantilados, los acantilados de la Costa Quebrada.
Después de su maravillosa luna de miel, y entrado ya el otoño, se volvieron a poner su traje y su vestido y nos fuimos a los acantilados. Tuvimos un día nublado, pero con unos colores azules muy intensos tanto en el mar como en el cielo y lo disfrutamos como enanos.
Lo bueno de hacer las postbodas en Santander, cerca de casa es que podemos aprovechar y estar más tiempo en la sesión. En esos acantilados miremos donde miremos encontramos siempre una foto nueva.
A continuación os dejamos con unas fotos de aquella tarde.